Redes sociales de lo personal a lo profesional

En el día de hoy nos sorprende la noticia de de como a una joven canadiense (Nathalie Blanchard) que llevaba un año y medio de baja laboral, ha perdido su prestación trás considerar su aseguradora al consultar su perfil de su Facebook que su estado de salud no es propio de una persona con síntomas de una depresión.

A raíz de este suceso se puede plantear si es lícito el empleo de la información personal colgada en las redes sociales con fines profesionales o institucionales. Se rompe así el fin primero de las redes sociales: relacionarse con los nuestros conocidos e intercambiar o mostrar un reflejo de nuestra vida personal.

No se trata esta de la primera noticia de este tipo, ya es conocido por todos que en ocasiones las empresas privadas a la hora de la contratación de un nuevo empleado consulten las diversas redes sociales para observar su perfil personal, y basándose en sus actitudes, preferencias y demás información, deciden que trabaje o no para ellos .

De este modo es normal preguntarse: ¿Es correcto este nuevo empleo de las redes sociales?¿Hasta que punto se respeta el derecho a la intimidad de la persona? ¿Se debe tener especial cuidado con la información que mostramos a través de Internet?

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